«La vida está para adelante nunca para atrás, si andas por la vida dejando puertas abiertas no podrás desprenderte ni vivir lo de hoy con satisfacción». Paulo Coelho.
Mirar atrás. ¿Cuántas veces te has preguntado cómo sería tu vida si hubieses tomado otras decisiones? ¿Qué hubiese pasado si te hubieses casado? ¿Cómo sería tu vida si hubieses aceptado esa oferta de trabajo? ¿Qué vida llevarías si hubieses elegido otra carrera profesional? ¿Qué hubiese pasado si hubieses aceptado la oferta de vivir en otro país?
Si hubiera …… es un comienzo de una frase que escucho con frecuencia. Y detrás de ese comienzo de frase escucho lamentos, sufrimientos, imaginaciones, envidias, justificaciones, añoranzas, estancamiento, miedos, etc.
Dice Henry Miller: «El mundo fantasmal es el mundo que no se ha conquistado del todo. Es el mundo del pasado, nunca del futuro. Avanzar aferrándose al pasado es como arrastrar una bola y una cadena».
Teniendo esto en cuenta ¿Para qué te sirve mirar atrás en tu camino?
Lo que pudo haber sido y no fue.
En algunas ocasiones escucho a mis clientes pensar en todo lo que podría haber sido diferente si hubiesen tomado otras decisiones. Si hubiera elegido ese trabajo ahora ganaría más. Si hubiese aceptado esa oferta de trabajo hubiese tenido un desarrollo profesional mayor. Si hubiese tenido hijos ahora……., etc.
Cuando les escucho decir esas frases les pregunto: ¿Para qué te sirve pensar cómo sería tu vida si hubieses tomado otras decisiones? ¿Cómo te sientes? ¿Cómo sabes que te iría mejor la vida si hubieses elegido otra opción? ¿Qué posibilidades hay de que te hubiese ido peor?
Al mirar atrás pueden aparecer arrepentimientos, añoranzas, sufrimiento, envidias de otros que tomaron otras decisiones, etc. ¿Para qué te comparas con los demás?
¿De qué se arrepienten las personas? La enfermera Bronnie Ware analizó de qué se arrepienten los pacientes que están en fase terminal y encontró estos 5 arrepentimientos:
- Hacer lo que quería hacer, no lo que esperaban que hiciera.
- No haber trabajado tanto.
- Expresar lo que sentía.
- Volver a contactar con mis amigos.
- Ser más feliz.
El profesor de la Kellogg School de la Northwestern University Neal J. Roese dice que aunque no todas las personas se arrepienten las que sí lo hacen se arrepienten de estos temas, por orden descendente:
- Estudios realizados.
- Carrera profesional elegida.
- Relación de pareja.
¿Para qué sirve mirar atrás?
- Aceptar el pasado.
Dicen que agua pasada no mueve molinos. Por lo tanto, lo pasado pasado está. ¿Para qué sigues pensando lo que pudo ser y no fue? ¿Cómo vas a vivir el presente?
Hay que dejar de mirar al pasado con nostalgia. Aquel tiempo pasado no fue mejor, es una ficción de nuestra mente. La única diferencia es que en «aquel pasado» no mirábamos al «pasado». Rafael Santandreu.
- Dejar de adivinar.
¿Quién sabe lo que podía haber ocurrido si hubieses elegido otra opción? Para mí el éxito es lo yo hago con las cartas que me tocan en la vida. Y la vida para mí es un camino de decisiones. Con las cartas que tienes ¿Qué quieres hacer?
- Aprender de los errores.
Es posible que los resultados que hayas obtenido al tomar tus decisiones no son los que esperabas. ¿Qué has aprendido en el camino?
Como dice Theodore Roosevelt: «Es duro fracasar, pero es peor nunca haber intentado triunfar».
- Celebrar los logros.
Para mi la vida está llena de decisiones e incluso pienso que no hacer nada es también una decisión. ¿Cómo celebras las decisiones que has tomado? ¿Cómo vas a valorar los logros que has conseguido?
- Valorar lo que tienes.
Dice Conny Méndez: «Mirando siempre hacia atrás se es inconsciente de lo bueno que se tiene al frente y se trae lo malo del pasado al presente».
Te invito a que al final de cada día escribas en una hoja todo aquello que agradeces en tu vida. ¿Cuánto valoras lo que tienes?
- Decidir qué quieres cambiar.
Teniendo en cuenta aquellas cosas que aún no has hecho y de lo que se suelen arrepentir las personas ¿Cuánto te arrepentirás si no haces lo que quieres?
Te animo a que reflexiones qué quieres, qué recursos necesitas y cuál va a ser tu plan de acción para conseguirlo.
«Se cree que la cima es el objeto de la escalada. Pero su verdadero objeto, la alegría de vivir, no está en la misma cumbre, sino en las adversidades sufridas durante la escalada. Hay valles, riscos, arroyos, precipicios y resbaladeros y al caminar por los senderos empinados el escalador puede pensar en no ir más allá, o incluso en que morir sería mejor que seguir adelante. Pero reanuda su lucha con las dificultades que tiene ante sí, y cuando por fin es capaz de mirar atrás y ver lo que ha superado, descubre que ha experimentado realmente la alegría de vivir en todos los caminos de la vida». Eiji Yoshikawa.
Te invito a leer este cuento: El tiempo y los plátanos.
¿Cómo vas a vivir tu vida a partir de ahora?
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